Técnica quirúrgica que tiene como finalidad la extirpación del tejido adenoideo - es decir, las vegetaciones- que ocupa la rinofaringe, área situada tras el velo del paladar, en la parte posterior de las fosas nasales. Cuando este tejido se desarrolla en exceso puede causar obstrucción nasal y otitis, entre otros. La intervención se efectúa a través de la boca, bajo anestesia general, y consistía (en su forma clásica) en legrar, es decir raspar, con un instrumento denominado adenotomo, las vegetaciones adenoideas.

Actualmente, la técnica del legrado se ha sustituído por la ablación del tejido adenoideo mediante terminales de radiofrecuencia, que minimizan el riesgo de hemorragia intra y postoperatoria, además de mejorar el control del límite de resección quirúrgica.

Intervención quirúrgica en la que se extirpan las amígdalas situadas a ambos lados del paladar, cuando éstas causan problemas debido a su tamaño, o a infecciones de repetición. La operación se efectúa bajo anestesia general y a través de la boca.

El desarrollo de la radiofrecuencia ha provocado su empleo para esta intervención, ya que permite la resección exangüe (sin hemorragia) del tejido amigdalar, así como, si estuviera indicado, la reducción del volumen amigdalar sin resección, mediante punción amigdalar, manteniendo cierta función y minimizando el riesgo hemorrágico.

Técnica quirúrgica que tiene como finalidad el tratamiento de diferentes procesos a nivel naso-sinusal-base de craneo-orbita, mediante su abordaje con ayuda de endoscopios rígidos de luz fría favoreciendo así el control visual y una mejor iluminación de las cavidades mencionadas. La técnica quirúrgica se realiza a través de los orificios de las fosas nasales, por lo que no aparece ninguna cicatriz externa. En el acto quirúrgico se pretende la extirpación de las lesiones, respetando al máximo la mucosa que tapiza las cavidades ya mencionadas e intentando conservar la máxima funcionalidad tanto de las fosas nasales como de los senos paranasales.

Dentro de la patología susceptible de ser tratada con esta técnica, encontramos: poliposis, sinusitis, papiloma invertido, ciertos tipos de tumores nasales, obstrucción lacrimal, septoplastia, tratamiento quirúrgico de la epistaxis, abordaje de cierta patología de la base del cráneo, imperforación de coanas y descompresión orbitaria.

La miringotomía, con o sin colocación de drenajes transtimpánicos, tiene por objeto airear el oído medio y extraer la secreción que pueda existir en él. Para ello se realiza, bajo visión microscópica, una pequeña incisión en el tímpano a través de la cual se aspirará el contenido del oído medio. En ocasiones se coloca un pequeño tubo de drenaje en la incisión timpánica, para evitar que se cierre, permaneciendo en ese lugar un tiempo variable que suele oscilar entre seis meses y un año. La intervención puede realizarse bajo anestesia general o local, dependiendo de la colaboración del paciente.

Consiste en la extirpación de una cuerda vocal, debido a la existencia de lesiones malignas o tumores. Se efectúa bajo anestesia general y la vía de abordaje es la boca del paciente mediante la introducción de un tubo llamado laringoscopio.

Técnica quirúrgica utilizada para tratar la Otosclerosis. Esta enfermedad se produce como consecuencia de la fijación y consecuente inmovilización de uno de los huesecillos del oído – estribo -, por lo que se deja de transmitir el sonido y se origina una sordera que, en ocasiones, se acompaña de ruidos –zumbidos- y vértigos. Esta intervención consiste en, mediante visión microscópica, acceder al citado huesecillo a través del conducto auditivo, extraerlo total o parcialmente y sustituirlo por una pequeña prótesis que posea la movilidad necesaria para transmitir de nuevo el sonido, recuperando, así, la audición. En ocasiones esta prótesis se debe apoyar en un injerto que se obtiene generalmente del trago - pequeño cartílago situado delante del conducto auditivo externo-. La anestesia empleada en esta intervención puede ser local o general.

Forma de exploración de la laringe en la que ésta se valora de una manera directa mediante la introducción, a través de la boca, de un tubo metálico, que se dirige hacia la propia laringe bajo control microscópico. Se trata de un procedimiento en el que se puede realizar una toma de biopsia de las zonas que se consideren oportunas, o tratar diferentes enfermedades de la laringe tales como pólipos, nódulos o tumores de cuerdas vocales. Se efectúa bajo anestesia general.

Técnica quirúrgica destinada al cierre de una perforación timpánica mediante la colocación de un injerto. Se realiza bajo visión microscópica, bien a través del propio conducto auditivo, o bien a través de una incisión realizada detrás del pabellón auricular. El material utilizado para cerrar la perforación del tímpano puede ser fascia temporal o bien pericondrio, tomados siempre del propio paciente. La intervención se realiza bajo anestesia general.

Técnica quirúrgica que tiene como finalidad la corrección de las deformidades del tabique nasal. Se efectúa bajo anestesia general y consiste en extirpar los fragmentos de cartílago o hueso que alteran la posición normal del tabique nasal en la línea media. Esta intervención se realiza mediante una incisión en la parte interna de la nariz, a través de la cual se extraen dichos fragmentos, sin alterar la estética externa nasal.

Técnica quirúrgica que tiene como finalidad la corrección de la forma externa de la nariz así como la mejoría de su función. La intervención se realiza bajo anestesia general, a través de unas incisiones que se hacen en el interior de las ventanas de la nariz. Después, los tejidos blandos se separan cuidadosamente de los cartílagos y huesos adyacentes y se corrigen las estructuras no deseadas. Posteriormente, los huesos y los cartílagos se sitúan de tal manera que tomen la forma adecuada para la nariz. Ocasionalmente puede ser necesario el uso de injertos de hueso o de cartílago. En el mismo acto quirúrgico se puede realizar la reconstrucción del tabique nasal, si está desviado, para aliviar la dificultad respiratoria que dicha desviación pueda producir.

Se realiza para tratar el origen y/o las secuelas de las infecciones del oído medio. Consiste en la limpieza de las cavidades del oído y la reconstrucción, si es posible, de la cadena de huesecillos y de la membrana timpánica. La intervención, llevada a cabo bajo anestesia general, se puede realizar a través de diferentes incisiones: hacia arriba, a partir del conducto auditivo, o, lo que es mas frecuente, por detrás de la oreja. En el caso de la existencia de un colesteatoma, a veces es necesario eliminar completamente el hueso que rodea al oído medio dejando una amplia cavidad a la que se accede a través del orificio auricular. Como materiales de reconstrucción se utilizan prótesis compatibles con el organismo o bien tejidos del propio paciente.

Su finalidad es la disminución del tamaño del cornete inferior en los casos en los que dicho cornete dificulta la respiración nasal. Llamamos turbinectomía a la extirpación total o parcial del cornete inferior con el mismo fin. La intervención se realiza a través de los orificios nasales, por lo que no deja cicatrices externas. La intervención se puede realizar bajo anestesia local con sedación, o bajo anestesia general y, en ocasiones, se puede utilizar el láser o la radiofrecuencia para disminuir el volumen del cornete y evitar al máximo la hemorragia.

Técnica quirúrgica que tiene como finalidad la ampliación del calibre del área de la válvula nasal. La intervención se lleva a cabo bajo anestesia general a través de los orificios nasales, por lo que no deja cicatrices externas. Se realiza mediante unas incisiones en la parte interna de las alas nasales, a través de las que se reseca el exceso de cartílago que cierra el área de la válvula nasal.